Kreator
nos ofreció un concierto pleno
de fuerza y derroche vocal e instrumental, (algunos
incondicionales, tal vez estén el cierto) se quejaron de falta de
contundencia en la batería de Jürgen
Reil, en algunos temas del final. A
mí, personamente, hubo momentos que me pareció estar ante un
concierto de los mejores
Slayer. (Mis oídos aún
mantienen
un pitido que no cesa) Con una
puesta en escena acorde con su último disco "Enemy
of Gold", la banda, sigue descansando
en los hombros de su líder
Mille Petrozza.
Agresivo, provocador, fue desgranando tema a tema sus más notables
éxitos, junto con los de su última entrega. Bastante
dicharachero (sobre todo al final del concierto), regaló dos
bises, al comprobar la buena - excelente- sintonía con la peña
asistente.
Gustaron y demostraron que pasan los
años y ellos y su sonido siguen siendo excelentes.
El trash está vivo, muy vivo.
Felicidades a todos. La luminotecnia, como no podía ser menos,
escasa (penumbra, tonos pasteles, y dificutad para lograr una
buena foto. Así debe ser.
La crónica especializada corre a
cargo del webmaster 2 (Luis). |
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Sala Aqualung (Madrid),
12 de febrero de 2005
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